La radio ha sido uno de los pocos medios de comunicación que ha mantenido el tipo tras la aparición de los soportes digitales. Las webs, los blogs y las redes sociales han desplazado en los últimos años a la prensa como medios informativos, produciéndose un descenso de los lectores y las audiencias. Pero la radio sigue teniendo algo especial que engancha a los oyentes, además de ser el medio que mejor se ha adaptado al mundo online a través de las aplicaciones, los podcast y la utilización de las redes sociales para interactuar con los oyentes. Los datos del EGM así lo corroboran: Cerca de 25 millones de españoles la escuchan todos los días, lo que nos da una idea de su poder de difusión.
Con los números sobre la mesa, podemos afirmar que la radio sigue siendo atractiva, eficaz y útil para los anunciantes. Esto es debido a:
Como hemos dicho, el consumo medio de la radio se ha mantenido. Es el medio que mejor está posicionado y que mejor se ha adaptado al entorno digital.
Es el medio de nos ofrece una mayor frecuencia (repetición de los anuncios) a un menor coste. Gracias a esta frecuencia y al elevado número de oyentes conseguimos un mayor impacto en el público.
Nos permite realizar una segmentación muy precisa y definir el público objetivo al que nos queremos dirigir. Este público lo obtendremos en función de las emisoras, los programas, la temática y el horario de emisión.
El coste de las cuñas de radio es más barato que el de un anuncio en la prensa o el de un spot de televisión.
La radio sigue ofreciendo mucha credibilidad en el oyente. El último estudio del Eurobarómetro, la herramienta de la UE para medir el estado de la opinión pública en los países miembros, señala que la radio es el medio de comunicación que goza de mayor credibilidad entre los ciudadanos. Este estudio, publicado este viernes, destaca el papel fundamental de la radio en la lucha contra la desinformación.
Por todas estas razones, invertir en publicidad en la radio es una de las mejores decisiones que podemos tomar. Seguro que obtendremos el retorno que esperamos tras realizar una campaña publicitaria.